Presentación!

Somos 5 estudiantes de Psicología de la Universidad de Chile y este blog se crea dentro del curso de Inclusión Educativa y Atención a la Diversidad.
Acá compartiremos reseñas de textos y publicaciones, noticias relevantes y cualquier otro elemento que sea un aporte a una discusión crítica sobre la forma de pensar y practicar la inclusión educativa hoy en día. Específicamente, queremos centrarnos en los actores sociales de la educación y en cómo éstos son parte de este proceso de inclusión.
Dentro de esta mirada a los actores sociales, es que hemos querido invitar a un docente amigo, Harry, a que participe con columnas de opinión acerca de la actualidad de la educación y sobre todo invitándolo a pensar la inclusión educativa.
En el costado derecho podrán encontrar más información acerca de cada una de nosotras, además, de enlaces de los otros blogs amigos del ramo y revistas especializadas en el tema.
Para una navegación más fácil, acá abajo encontrarán tres etiquetas: Entradas personales, que son los recursos que cada una de nosotros ha querido compartir y comentar; Harry, que son las columnas de nuestro docente invitado; y Textos, que corresponden a las fichas de lectura.


Saludos a todos!

Monday, November 10, 2014

A esos actores.

Es la última entrada al blog que escribo, y quería hacer un comentario de algo que me realmente llegara a mi corazón. En una de las clases hablamos de a quién recordábamos como un facilitador de aprendizajes, todos recordamos a profesores o inspectores y contamos nuestras historias.

Hoy quiero hablar desde ahí, desde esos recuerdos con cariño. Muchas veces estudiamos distintas materias, que nos pueden gustar más o menos, pero que se consideran importantes en nuestra formación, suele pasar que esperamos que los docentes nos entreguen información, contenidos, "materia", pero en múltiples oportunidades nos entregan más que eso.

Hoy la Facultad despide a uno de nuestros docentes, ciertamente un docente que marcó a quienes tuvimos clases con él. De esos "profes" que te enseñan más que contenidos, te preparan para distintas situaciones que van más allá del aula. Sin duda perdimos a unos de los profesores que uno recuerda por siempre.

¿Qué tiene que ver esto con la inclusión?. Todo.  Si hay algo que le agradezco al profesor Betancourt es que sabía que todos eramos distintos, y podía explicar una y mil veces cada teoría, buscando ejemplos cada vez más simples para explicar todo,  Comprendía la particularidad de nuestras necesidades de aprendizajes, sin hacer diferencias, sin excluir a los alumnos, generaba un ambiente en que todos estábamos incluidos, en que todos aprendíamos.

Para finalizar el ramo agradezco el espacio que el curso me ha dado, el ambiente que fomentó el equipo del curso, las risas, las anécdotas y la escucha atenta. Gracias por todo, porque sin duda ustedes también son de los docentes que traspasan la barrera del aprendizaje de contenidos, y llegan al aprendizaje de vida.

La última columna de Harry.

Desde mi última publicación en este medio me he transportado a mis recuerdos de escuela, encontrando preciosos momentos así como otros que desearía olvidar.

Recuerdo con orgullo mis medallas de alto rendimiento, mis diplomas, las olimpiadas de matemáticas, los debates de lenguaje y las ferias de ciencia. Sin embargo se me hace inevitable recordar los pesares que debíaa sortear en los deportes, en las artes visuales y la música; las burlas de mis compañeros más aventajados se me hacián crueles y sin sentido, pero solo hoy logro comprender el por qué, sus burlas no eran más que una respuesta a las mías.

Recuerdo mi infancia con pocos amigos debido a mi fanfarronería,pero para que me debo contarles la historia que por años olvide. 

Cuando competía dentro (o fuera) del colegio en distintas áreas siempre ganaba porque me preparaba mucho, no salía a jugar con los hamster de mi edad por estar estudiando y siempre veía buenos resultados de mi estudio, es por esto que no entendía cómo podía haber hamsters que necesitaran más tiempo u otras herramientas para aprender; todo eso cambio cuando llegó un muevo compañero a la escuela, camilo se llamaba, él era ciego. 

Todo compañero nuevo me significaba desconfianza porque podía ser que fuera mejor que yo,pero con Camilo no fue así. Al saber que era ciego asumí que jamas me ganaría en nada y que solo sería un hamster que entorpecería las  clases con su "necesidad especial" como lo presentó la profesora. 

Con el pasar del tiempo llegó lo que yo estaba evitando, la prueba de la rueda, sí la rueda que todo hamster debe aprender a correr. Claramente, como ya lo comenté anteriormente mis condiciones físicas no eran las mejores, por lo que el miedo me ganaba,  sabía que no lo lograría por lo que me propuse quedarme a ensayar. Cada tarde esperaba a que todos se fueran y me quedaba intentando correr, todo fue un fracaso total, la decepción me ganaba. Una tarde Camilo se quedó en el colegio, y me escuchó intentar superar la rueda, como pudo se acercó y me ofreció su ayuda, me enseñó a correr dejando el miedo de lado, al principio rechacé su ayuda hasta que le dí la oportunidad de mostrarme cómo se hacía. Finalmente el día de la prueba recordé todos los consejos de Camilo y todo funcionó, pasé la prueba. Solo ahí comprendí que Camilo no era "especial"  (en el mal sentido de la palabra) solo era diferente, como eramos todos.

Por años olvidé esta historia, y solo en la reflexión de un café lo comprendí.La inclusión no es mirar en menos, no es hacer sentir al otro más especial, es solo comprender que todos lo somos, porque todos somos distintos y merecemos un lugar.

Para finalizar doy gracias por la oportunidad de pertenecer a este espacio, y ayudarme a recordar esta historia, y por incluir mis opiniones sin filtro. Por aceptarme como soy.

-Harry-

A la Base

Estaba pensando sobre qué hacer mi última entrada en este blog, la entrega y presentación del mismo es hoy y me gustaría expresarme un poco más antes de finalizar el curso que no llevó a embarcarnos en esta aventura que es crear información libre y accesible. Recordé entonces que a lo largo de todo este viaje nos hemos apoyado en textos utilizados para este ramo, hemos hecho fichas y los hemos incluido dentro de nuestras opiniones, pero, ¿Qué hay de lo anterior a este ramo? Hace un años atrás dí el examen de Psicología Educacional y creo que en lo que más fallé fue al referirme en las teorías críticas y las no críticas, el sistema actual.

Desde la teoría en la cual se basa nuestra educación Chilena se encuentra la base de la segregación escolar, la explicación de la supuesta necesidad existente en diferenciar a los alumnos ya sea por avances en sus estudios, capacidad intelectual, capacidad física, motivos económicos, religiosos, etc. Por ende encuentro necesario hablar un poco de estas teorías en este momento


En primer lugar, para contextualizar, es conveniente hacer referencia a que el sistema educativo en el cual nos encontramos se enmarca dentro de las Teorías No Críticas, que a grandes rasgos, buscan superar la marginalidad a través del conocimiento, de la educación, dejando de lado los aspectos políticos y económicos que pudieran influir en ello. Pero esta no es la única manera de concebir la educación, pues existen las llamadas Teorías Críticas, que plantean la necesidad de entender la educación a partir de sus determinantes sociales, la influencia del sistema económico y cómo la política la afecta, pasando a ser en sí misma segregadora y marginadora.
De esta forma podemos apreciar cómo el sistema educativo es posible comprenderlo dentro de las Teorías de Reproducción, que plantean que es un mecanismo de reproducción del sistema hegemónico, tanto en términos de la división del trabajo, la ideología y las formas de obtener conocimiento consideradas válidas. Es así como dentro de la escuela se convierte en una pequeña obra de teatro del resto de la sociedad; la desigualdad, la competencia, en intento de cuantificar el progreso son algunas de las cosas que desde pequeños se le inculcan a los niños, dejando de lado el desarrollo de sus potencialidades, privilegiando el que sean funcionales al sistema por sobre su felicidad y desarrollo. Afortunadamente frente a esto existen las Teorías de la Resistencia, que plantean la posibilidad del cambio, considerando a la escuela como un campo de batalla en el que la clase dominante intenta imponer su visión de la sociedad, pero es posible oponerse, planteando y ejecutando una educación al servicio del desarrollo humano y no del capital, teniendo como respaldo a la historia que demuestra que el orden actual no siempre fue así, y que no está determinado que así seguirá siendo, como ellos quieren.
Lamentablemente el actual sistema educativo chileno se encuentra profundamente arraigado, y tiene como punto de partida, en lo legal-institucional, la ilegítima Constitución Política de 1980, impuesta por la dictadura y respaldada en las últimas décadas por la Concertación, que establece la libertad de enseñanza, entendida desde ópticas mercantiles, por sobre el derecho a la educación. El Estado se ha desentendido de su deber en este ámbito, dando el espacio y el incentivo para que los privados se hagan cargo del sistema educativo, adquiriendo un rol de observador y suave fiscalizador. Los privados han podido lucrar desenfrenadamente con las universidades, los colegios, priorizando el obtener ganancias por sobre entregar una educación de calidad, concepto que da para una amplia discusión, pero que podemos tener claro que para ellos no se relaciona con el desarrollo humano fuera de su funcionalidad al sistema capitalista. La municipalización ha venido a agudizar las desigualdades educativas en términos de los heterogéneos recursos que las municipalidades pueden invertir en educación, permitiendo que los sostenedores tengan más poder.

Se han implementado una serie de pruebas estandarizadas como el SIMCE y la PSU que están muy lejos de medir los conocimientos o habilidades de los estudiantes; sus  resultados se encuentran en función de la situación socioeconómica de las familias, la escolaridad de sus padres, etc. Estos resultados han impulsado una férrea competencia entre los establecimientos educacionales, ya que el que tengan buenos puntajes en las pruebas estandarizadas se convierte un erróneo indicador de calidad, que hace que los padres tiendan a preferirlos. Así, los colegios con más recursos terminan obteniendo mayores puntajes y más padres deseosos de meter a sus hijos en ellos, y los que no los tienen terminan desprestigiándose, perdiendo matrícula, teniendo menos dinero, etc. Esto se ve especialmente potenciado por las subvenciones que entrega el gobierno por la asistencia a clases; más alumnos, más dinero. El Estado ha venido a potenciar este círculo vicioso con el potenciamiento de la competencia, incluso cerrando escuelas (municipales en su gran mayoría), por no obtener buenos puntajes, por no adecuarse a lo que debiera, bajo parámetros económicos, ser una educación de calidad.

Y algo más cercano, es lo perjudicado que se han visto los docentes bajo este sistema educativo, ya que se han deteriorado enormemente sus condiciones de trabajo y sus salarios. Se les suele culpabilizar por los malos resultados obtenidos por los estudiantes y cada vez se enfrentan más al temor (y realidad) del desempleo, motivado además por la sobre saturación de la cantidad de profesores en algunas áreas específicas, lo que se relaciona abiertamente con que los planteles educacionales, privados sobre todo, imparten carreras pensando en sus ganancias y no en las necesidades del país.

Es así como se presenta la realidad del sistema educativo, una que a todas luces se ve como dramática, pero que nos plantea el desafío, la posibilidad, y más aún, la necesidad de ser transformad. El comprender cómo funciona el sistema, los distintos actores involucrados y sus aspectos, pienso nos acerca un poco más a lograr esta difícil tarea, pero a la vez nos deja ver lo complejo que es, porque no sólo es una cuestión de recursos, de desmunicipalización, sino que involucra al sistema económico, a los intereses de la clase dominante y cómo estos mueven las decisiones políticas.

Sunday, November 9, 2014

Columna de Harry #7


He quedado anonadado al ver esta imagen... estábamos embarcados en una discusión acerca de cómo evaluar a los estudiantes del programa de integración escolar, y obviamente yo estaba un poco aburrido, porque como he dicho antes, para mi es tema zanjado: cada profesor evalúa según sus criterios, pues tiene la formación especializada para eso. 
Bueno, estaba yo pensando aquello, y un profesional no docente, que había propuesto la discusión, muestra esta imagen. Primero no le di importancia, pero luego... una vez, cuando era yo un estudiante de quinto básico, tenía que rendir una prueba en educación física: el test de Navette. Yo era un alumno brillante, primer estudiante de la clase... pero odiaba correr! Jamás lo hacía, así que tenía una resistencia aeróbica bajísima comparado con mis compañeros que jugaban a la pelota. Recuerdo que para obtener la nota máxima debía seguir el ritmo del test durante 5 minutos... creo que duré 2. Lloré amargamente toda la tarde... yo era el primer lugar! El más inteligente! Pero no podía trotar durante 5 minutos sin sentir que me ahogaba. 
Y entonces pude entender a los colegas que defendían la evaluación diferenciada e incluso a los radicales que proponían un "aula inclusiva" y que pensaban la evaluación como una medición situada a los logros y avances de cada estudiante, y no como la medición estandarizada de la inteligencia.
Aún no lo comparto del todo, pensar así la evaluación, y la educación en general, tiene una serie de problemas metodológicos, sobre todo dada la realidad de la medición estandarizada en el sistema educativo actual (SIMCE y PSU), pero sí concuerdo en que, efectivamente, los estudiantes no tienen por qué ser una masa homogénea de personas, y por lo tanto, los profesores no debemos asumir que todos aprenden de la misma forma, ni mucho menos que todos tienen las mismas cualidades, intereses y necesidades. Creo que podemos avanzar en crear un aula más atenta a esas características, docentes más atentos a la voz de sus estudiantes, si al final nuestro objetivo es que ellos aprendan, que ellos incorporen lo que el currículum nos exige que sepan... ¿por qué no escuchar cómo ellos creen que aprenden mejor?

Columna de Harry #6

-Trabajo de los docentes-
Tengo que asumir que soy minoría en este blog, en verdad estoy completamente solo. El pensamiento de las editoras es muy distinto al mío y sus publicaciones son bastante hippies. Pero las he leído, por respeto a ellas y no porque quiera.
Pero si me han logrado convencer de algo es que no todos los niños son iguales, ¡cómo no iba a pasar si en todas sus fichas hablan de lo mismo! Aun así, entiendo su punto. Como no hacerlo, si pensamos un poco en cómo fue nuestro paso por la escuela nos podremos acordar que todos éramos distintos, pero los profesores nos trataban a todos igual.
El trabajo de los docentes es sumamente importante, porque son ellos los que moldan a los niños, ellos les enseñan las cosas que sirven en la vida y los valores que son necesarios en nuestra sociedad, como el respeto o la disciplina. Pero también es importante sentirse bien, ¿o no? Se supone que el colegio es solo para ir a aprender, pero facilita tanto el proceso que sea en ambiente agradable y de tolerancia. En lo personal, me cargaba Física y era solamente porque el profesor era desagradable, una vez nos dijo que éramos inútiles por no entender los contenidos… ahora entiendo que es importante el orden, pero ¿y la aceptación o la tolerancia? Entonces el trabajo de los docentes no se limita a pasar materia, sino que también tienen injerencia en nuestra forma de pensar y actuar. Siendo así, se deben incluir además valores que posibiliten la aceptación de la diversidad.
Me confundí… ¿los profesores, entre sus muchas funciones, tienen que moldear a los niños para que sean buenos ciudadanos? Sí, creo que sí. ¿Debemos tomar en cuenta las diferencias individuales de cada niño? Si así fuera, estoy seguro de que sería mucho más agradable para los niños ir a la escuela. Querrían ir de verdad y no por obligación, hasta puede que le encuentren sentido. ¿Es bueno inculcar valores como la tolerancia, el respeto mutuo… o la inclusión quizás? Decir que no es socialmente mal visto, nadie en su sano juicio puede estar en contra del respeto. Pero es tan difícil (por no decir imposible) combinar ambas visiones, se que las editoras han subido muchos textos que dicen lo contrario, aún así sigo sin entenderlo por completo.

A lo mejor es necesario definir bien que es lo que queremos que nuestros niños aprendan y cuáles son los valores y actitudes que son más valiosas para nosotros, que tengan un efecto real en nuestra sociedad…

El Plan Maestro

"¿Por qué? Porque grandes profesores hacen una gran diferencia. Y de ellos depende, más que de cualquier otro factor, la calidad de nuestra Educación."

El Plan Maestro fue un proceso desarrollado este año, por iniciativa de 20 instituciones comprometidas con la educación, que buscó a través del diálogo ciudadano, concordar las bases para una nueva Profesión Docente, en 120 días. Estuvo conformado por dos instancias: el Foro Base y el Consejo Consultivo, en la primera se discutieron y construyeron acuerdos, mientras que la segunda , compuesta por las instituciones convocantes, guiaba el foro y enriquecía los resultados de éste. El Foro Base estuvo conformado por alrededor de 45 personas, representantes de diversas realidades de todo Chile, entre ellos docentes, estudiantes, apoderados, sostenedores, expertos, etc.

De este proceso resultó un documento final, con 129 propuestas para una nueva política nacional docente, que fue entregado al ministro de educación, Nicolás Eyzaguirre. Estas propuestas están basadas en 12 principios:
1-  Docentes con vocación para enseñar y un sólido manejo disciplinar y pedagógico. Chile necesita que estos docentes sean autónomos, empoderados, reflexivos, conscientes de su responsabilidad en la formación integral de ciudadanos, y con altas expectativas respecto de la capacidad de aprender de sus estudiantes.
2- Mejor formación inicial docente, con más exigencias y mayor vinculación con la realidad escolar.  En todo Chile se requieren instituciones formadoras de alta calidad, selectivas en su ingreso, académicamente exigentes y orientadas a formar docentes vinculados a la realidad del aula y su contexto.
3-  Carrera docente para los maestros de todos los establecimientos que reciben financiamiento público. 
4-  Carrera docente financiada por el Estado. 
5-  Carrera docente ascendente y atractiva.  La progresión dentro de ella debe ser ascendente en términos de las remuneraciones y otros reconocimientos asociados, y fomentar que los buenos docentes de aula permanezcan en ella, promoviendo al mismo tiempo trayectorias profesionales alternativas. Las oportunidades de progresión dependerán de su desempeño, dentro y fuera de la sala 
de clases, y se considerará también la experiencia y el desarrollo profesional.
6- Evaluación docente universal y formativa. La evaluación docente debe ser una exigencia para todos los docentes que trabajen en instituciones que reciben recursos públicos, y estar gobernada por un propósito eminentemente formativo. 
7-  Desarrollo profesional docente para mejores logros educativos. El desarrollo profesional debe poner foco en el aula y privilegiar la calidad del aprendizaje. Esto exige que los programas de formación se orienten a mejorar prácticas, competencias y habilidades pedagógicas y didácticas.
8-  Mejora sustancial de remuneraciones para actuales y futuros docentes. 
9-  Mejores docentes para los sectores de mayor vulnerabilidad.
10- Aumento significativo y delimitación del uso de horas no lectivas. Es imprescindible aumentar significativamente la proporción de horas no lectivas, de forma que exista el tiempo adecuado para realizar labores tan importantes como son la planificación, los procesos de evaluación, el trabajo colaborativo y la relación directa con la comunidad, entre otras dimensiones centrales del aprendizaje.
11- Escuelas y jardines infantiles protagonistas de su desarrollo. Los establecimientos educacionales deben desempeñar un rol protagónico en el diseño y ejecución de sus propios planes institucionales, así como de sus programas de desarrollo profesional docente. Para esto último, mantendrán una articulación constante con el Estado, las universidades u otras entidades formativas de forma que cada institución sea efectivamente una comunidad de aprendizaje.
12- Comunidad Educativa integradora y colaborativa en el mejoramiento de los procesos educacionales y el aprendizaje. La carrera docente debe dialogar con una nueva visión de la Comunidad Educativa en la que los docentes, asistentes de la educación, directivos, sostenedores, apoderados y estudiantes se comprendan a sí mismos como un solo equipo, con el objetivo común de formar una comunidad educativa que brinde las mejores oportunidades de aprendizaje a los niños, niñas y jóvenes. En tal sentido, es necesario reconocer e integrar la riqueza de la diversidad, así como reconocer el rol fundamental que cumplen los asistentes de la educación en este aspecto.

Si bien el último principio incorpora la idea acerca de la Comunidad Educativa, el resto está dedicada casi exclusivamente a la labor docente, enfatizando en la centralidad que éstos tienen a la hora de hablar de educación de calidad. En este sentido, este documento entregado al ministerio de educación como una iniciativa ciudadana, pone en los profesores la responsabilidad casi total de que el proceso de enseñanza-aprendizaje arroje los resultados esperados por el sistema educativo. Además está enfocado, principalmente, en las trabajadores del sistema público.

A mi parecer, esta responsabilización de los docentes es una salida rápida y fácil al problema de la segregación y de la "mala educación" que reciben los estudiantes, y está más bien alejada de la perspectiva de inclusión que hemos pensado en el curso. Están pensando en perfeccionar la labor docente, apelando a la formación inicial y a la carrera docente, garantizada por el Estado, porque los están pensando a ellos como el factor del que depende la calidad de la educación... 

Evidentemente yo discrepo, por un lado, porque la calidad de la educación depende de todos los actores que participan del proceso, esto es, alumnos, apoderados, docentes, paradocentes, directivos, sostenedores, etc., por lo tanto todos éstos debieran tener algo que decir al respecto y debieran compartir la responsabilidad de esa calidad. Por otro lado, en ningún momento se habla, en el documento, de que el profesor debe encargarse de incluir a la totalidad de los estudiantes, a mi parecer, se asume que está trabajando con un alumnado homogéneo. De todas formas, me parecería insensato que se le exigiera a los docentes pensar en técnicas de inclusión, pues insisto en que alcanzar una educación inclusiva no está sólo en manos de los docentes, se deben formar redes y trabajar colaborativamente, si queremos algún día tener una educación de calidad, que sea inclusiva y que medie el desarrollo integral de todos quienes participan del sistema.

Fuente: www.elplanmaestro.cl

Columna de Harry #5

En estos últimos días he vuelto a pensar sobre lo que discutía ese grupo de jóvenes la vez pasada, del aprendizaje social, el trabajo colaborativo y las comunidades de aprendizaje. Y me han rondado algunas nuevas ideas al respecto.
Me considero alguien muy crítico y reflexivo, he desarrollado la capacidad de pensar, en parte, gracias a lo que he vivido, lo que visto y lo que me han transmitido otros, ya sea en conversaciones informales o con publicaciones de distintas índoles. Quizás el aprendizaje social no es tan malo después de todo, podría tener una faceta positiva, ampliaría nuestros conocimientos de una forma más cercana, humana y divertida, y que está a favor de la reflexión.
Pero no me puedo imaginar, ni sentirme cómodo, con un colegio que enfatice la conversación y el trabajo grupal. Y que deje de lado las evaluaciones individuales las cuales sin duda nos dicen cuánto sabe alguien, cuán inteligente es alguien en comparación a los demás.
Acaso han pensado ¿cómo enseñar las disciplinas serias y útiles, como las ciencias duras, con esta forma un tanto hippie de educar? ¿cómo se evaluaría de forma justa a todos los estudiantes?.
Esta nueva forma de enseñar y aprender es tan radical como utópica. Suena linda pero siempre es más fácil decirlo que hacerlo. Además, sigo creyendo que el mundo está en “modo individual” y debe seguir así para que los débiles no se aprovechen de los más fuertes, los más aptos. En este sentido, la educación tradicional ha perdurado por siglos por su capacidad de formar personas aptas para el mundo actual, cambiarlo sería muy difícil.

Columna de Harry #4

-Lucro y marcha CONFEPA-
La marcha convocado por la CONFEPA el pasado sábado 25 de octubre es un reflejo de que miles de personas piensan igual que yo, que nadie nos puede coartar nuestra libertad de elegir como y donde educar a nuestros hijos y si queremos gastar dinero en ello, es cosa de cada uno. Me sentí orgulloso de esa marcha. Pero las editoras me presentaron un video (por no decir que me obligaron a verlo) de las personas que acudieron a la marcha y sus respuestas sobre la educación (lucro, negocio, selección, etc.). 

Es claramente un video mal intencionado, pero lamentablemente tiene razón en un punto, la gente no tiene ni idea porque está reclamando: están en contra del lucro, pero no quieren el negocio en la educación.
Como no quiero ser de esos que son inconsecuentes y que solo reclaman por reclamar, me propuse pensar un poco sobre el tema, motivado por darle más consistencia a mi pensamiento y darle un argumento sólido a las editoras de este blog.
Como ya he dicho, estoy de acuerdo con el lucro en la educación porque nadie trabaja por “las gracias”. Todos cobramos por nuestro trabajo, por lo que el negocio debe existir. Pero me sigue dando vuelta la pregunta del video, ¿yo pagaría por algo que es gratis? Hay que ser tonto para que decir que sí, pero se supone que pagar nos asegura la calidad de la enseñanza de nuestros hijos. Es por eso que estoy pagando. Pero hay colegios sin lucro que entregan educación de calidad, eso dice la noticia en emol… no tiene sentido para mí. Yo entiendo el lucro como un seguro de la calidad.
Además, estoy de acuerdo que los profesores tengan un buen sueldo y ese también es un argumento para el lucro, que los docentes tengan lo que les corresponde. Pero, ¿Qué hacen los sostenedores para ganarse esa plata? Manejan los colegios como si fueran gerentes, es verdad… pero ¿es necesario tanto margen de ganancia? Y hay que considerar también que hay colegios en donde se lucra y no obtienen ningún resultado, son un verdadero negocio en todo el sentido de la palabra. Reprochable…
Entonces, ¿es bueno o no el lucro? El dinero nos puede asegurar de tener más implementos o materiales en el aula y eso no nos asegura de los buenos resultados… realmente no se qué pensar

Creo que fallé en mi búsqueda por argumentos sólidos.

Columna de Harry #3

El otro día tuve la oportunidad de escuchar a un grupo de jóvenes que discutían sobre cómo debía ser la educación. Tocaron distintos temas, como el lucro, la selección, los docentes, las políticas públicas, entre otros (que yo ya conocía). Respecto a estos, no todos estaban de acuerdo en pequeños detalles, pero en general, eran todos unos comunistas resentidos que veían la mala intención en aquellos que mejoran el país creando colegios, universidades, oportunidades, empleos, buenas leyes y conocimiento/iluminación en otros.
Pero había un tema nuevo para mi y en el que todos estaban de acuerdo, se referían a él como trabajo colaborativo, aprendizaje social o comunidades de aprendizaje. Primero decían que lo ideal sería que los profesores trabajaran en conjunto, que dialogaran para así mejorar los procesos de enseñanza y aprendizaje en las escuelas. Desde aquí ya están equivocados. Por algo los profesores se especializan en sus materias y tienen sus propias metodologías de enseñanza y evaluación, además de sus propios objetivos. Juntarlos sería un error garrafal que los llevaría a la confusión y pérdida del límite de sus roles, se darían muchas peleas y aquello afectaría negativamente su rendimiento, y en consecuencia, el de los alumnos.
Otro punto era, según ellos, que los niños aprenden mejor en grupo, aprenderían de otros y gracias a la ayuda de otros. Por el contrario, si tenemos en un grupo personas inteligentes y otras que no lo son, y los hacemos trabajar juntos, lo único que lograríamos es retrasar a los inteligentes mientras los atrasados se aprovecharían. Siempre hay unos que hacen todo y otros que hacen nada. El aprendizaje es individual, ¡uno es el que aprende y usa lo que aprendió!, me daban ganas de preguntarles ¿de qué sirve aprender entre todos cuando el mundo está pensado en términos de individualidad?.
Finalmente, otra cosa que mencionaban era la participación de toda la comunidad educativa en el diseño, planificación e implementación del currículum escolar, incluyendo a profesores, alumnos y familias. Que los profesores estén involucrados me parece correcto sólo si son personas contratadas por el gobierno para aquello, o sea, no cualquiera puede hacerlo. Ahora, ¡alumnos y familias involucrados me parece atroz! son personas que no saben nada al respecto. Los alumnos van al colegio o a la universidad precisamente para aprender, mientras que las familias son el apoyo de ellos y entregan otro tipo de educación (la de la casa), su opinión no tiene ningún peso porque son personas comunes, incultas, que probablemente se dejan llevar por argumentos comunistas de los dirigentes universitarios. Sólo personas calificadas deben realizar este trabajo, ellos saben lo que es mejor para el país.

Exclusión al ingresar, Exclusión al egresar

La educación como factor de cambio social es un arma de doble filo, ya que en un sistema en dónde los recursos destinados para educación dependen más del poder adquisitivo familiar que del gobierno, muchas veces (por no decir siempre) la escuela es sólo un reproductor de condiciones sociales y no un agente de cambio.


En esta columna pretendo poner en la palestra dos casos muy cercanos en los cuales me he visto involucrada en distintos procesos de estos, los cuales son tremendamente diferentes entre sí, tanto en sus docentes, como su administración, la comunidad que los sostiene y por sobre todo los alumnos que se encuentran en cada uno de ellos. Se pretende hacer una revisión de entre la relación existente entre la exclusión que sufren los alumnos de dichos colegios a la hora de egresar de la enseñanza media y la exclusión social sufrida antes de ingresar a estos centros educacionales.

El primero es el Instituto Nacional y el segundo el Colegio Alicura, los resultados en los cuales nos basamos para hacer esta diferencia serán dos, los resultados PSU que indicarían las probabilidades de entrar a alguna universidad y entonces obtener un título profesional. El otro factor que es de relevancia será el sistema de ingreso a ambos colegios.

Instituto Nacional, promedio PSU. 671 ubicándose en el puesto 21 de los resultados PSU. El Colegio Alicura, promedio PSU 385, se ubica en el lugar 2786 de los establecimientos que rindieron la PSU. Estos 286 puntos de diferencia en el puntaje de entre ambos colegios marca una gran diferencia a la hora de hablar de exclusión en la Sociedad Chilena, debido a que en Chile el no ser profesional es un factor totalmente influyente en la exclusión, condiciones laborales y por sobretodo condiciones sociales como lo son el acceso de a la salud, vivienda, seguridad, etc.

Teniendo en cuenta entonces que los alumnos que egresan de estos colegios tendrán diferentes condiciones en su vida futura, siendo unos muchos más beneficiados que otros, queremos entonces caracterizar a los alumnos que ingresan a estos colegios, cuáles son sus condiciones antes de ser “formados” por estos centros educativos.

Las postulaciones a ambos colegios se realizan en distintas etapas y consideran aspectos diferentes, en el caso del Instituto Nacional los requisitos son, notas de años anteriores, examen de ingreso y pago por inscripción, siendo la prioridad de ingreso el resultado de la prueba de admisión, a su vez, el Alicura tiene los siguientes requisitos, Ficha de protección social, informe de personalidad, entrevista con los padres y la prioridad para ingreso es la condición de vulnerabilidad socioeconómica.


Si observamos los factores anteriormente nombrados observamos diferencias abismantes a la hora de ingresar a cualquiera de estos establecimientos, siendo entonces uno de los factores y el más notable, la condición socioeconómica de los padres o tutores de dichos alumnos, ingresando los mejores alumnos a un colegio “formador de puntajes nacionales” y los peores, con peores antecedentes familiares a un colegio “en el cual para entrar necesitas haber repetido dos veces”, vemos entonces como la exclusión es un factor que se hace presente desde que el niño es niño y no existen reales oportunidades de modificar estas condiciones. 

Actores sociales y educación

Durante el mes de Mayo de este año, y frente a la inminente reforma educacional, se organizó el Encuentro de Actores Sociales por la Educación, organizado por la CONFECH, ACES y CONES. En aquella ocasión se reunieron diversas organizaciones del mundo educacional: el Colegio de profesores, el SUTE (sindicato único de trabajadores de la educación), el MESUP (movimiento de estudiantes de educación superior privada), la OFESUP (organización de federaciones de educación superior privada), la ANDEPA (asociación nacional de padres y apoderados), la CORPADE (coordinadora de padres y apoderados por el derecho a la educación) e Inhabilitados Conicyt.

La finalidad de este encuentro era discutir el rumbo que la educación debía tomar en el país y qué acciones debían tomar los distintos actores sociales para participar en la construcción de ese proyecto educativo. En el documento que surgió de ese encuentro, se reconoce, en primer lugar, que el modelo neoliberal bajo el cual se rige el actual proyecto educativo del país entiende la educación como un bien de consumo y no como un derecho social, siendo a la vez profundamente individualista y segregador.  En segundo lugar, propone un proyecto educativo construido con participación e incidencia de todos los actores involucrados en el proceso formativo (estudiantes, profesores, trabajadores no docentes, padres y apoderados) y orientado hacia las necesidades de la sociedad en su conjunto.

Este proyecto educativo plantea que el sistema educacional debe estar financiado por el Estado, en todos sus niveles, y no mediante subvenciones por estudiante, sino con aportes basales directo a las instituciones estatales. Por otro lado, propone una educación de excelencia "entendida más allá de un resultado contingente en una prueba estandarizada, educando en valores como la solidaridad, la tolerancia, la igualdad, el respeto por el medio ambiente, la identidad y las raíces culturales e históricas de nuestra sociedad y en sintonía con las necesidades del país, tanto productivas como culturales" (p. 2). Esto último implica que la educación debe gestionarse y planificarse descentralizadamente, desde las comunidades principalmente y teniendo en cuenta las particularidades de las distintas zonas geográficas del país.

A mi entender, este proyecto, pensado desde los diversos actores involucrados en la educación, busca la participación de éstos, no sólo en la construcción de la reforma educacional, sino más allá, en el proyecto educativo de cada institución. Los distintos actores sociales están pensando la inclusión, no sólo como un proceso que se da dentro del aula y entre los estudiantes, sino como un proceso en que se atienden las necesidades e intereses de éstos, así como de la comunidad educativa (profesores, trabajadores no docentes, directivos, etc.) y la comunidad que rodea a la escuela (territorio, padres, apoderados, etc.). 

Además, con la propuesta del fin a la subvención por alumno, están dando pie a la abolición de los programas de integración escolar y los otros programas enfocados en la atención e integración de alumnos diagnosticados; a mi parecer, esta propuesta tiene a la base la comprensión de que TODOS los estudiantes tienen características y necesidades particulares, tanto barreras como recursos, que se deben tomar en cuenta!! Y no sólo los estudiantes tienen barreras y recursos particulares, sino la comunidad en su conjunto! De ahí se desprende el resto: la descentralización, la participación, la construcción de un proyecto educativo inclusivo y con sentido... 

¿Pero qué pasa cuando esta propuesta se encuentra con la emanada desde el gobierno para la reforma educacional? En julio de este año, el ministro de educación, Nicolas Eyzaguirre, lanzó e hizo un llamado a participar del Plan Nacional de Participación Ciudadana, que buscaba recoger las opiniones de los actores de la educación sobre la reforma. En palabras oficiales, este proceso de diálogo y construcción ciudadana de la reforma "cumple lo que la Presidenta Bachelet prometió: una reforma no sólo para todos, sino que con todas y todos", enfatizando que será un proceso “incidente” y que “todas aquellas coincidencias que haya entre la opinión ciudadana y el contenido fundamental del programa de la Presidenta Bachelet, serán más que acogidas”.

Este plan incluía diálogos técnicos, ciudadanos y temáticos. A través de un documento base se plantean distintos puntos esenciales para la discusión, y a modo de introducción se enfatiza en la exigencia que ha hecho la ciudadanía del derecho a la educación, y de un Estado garante de éste. Se plantea el problema de la segregación y desigualdad en el sistema educativo, que tiene repercusiones directas en la calidad y en el "deficiente desempeño de los alumnos en pruebas internacionales", comparado con naciones del mismo nivel de desarrollo que Chile. 

Se dice también que el fin de la reforma es "evolucionar desde la lógica de la educación vista como un bien de consumo, regulado por el mercado y determinado por el nivel de ingreso de cada familia, hacia la lógica de la educación asumida como un derecho y un bien social garantizados por el Estado". 

Si bien este documento base coincide en varios aspectos con el documento señalado con anterioridad, hay aún aspectos fundamentales que siguen inamovibles en la lógica del gobierno, entre ellos está la idea de inclusión como opuesta a segregación, con énfasis en la dimensión socio-económica de los alumnos y sus familias; también queda sin cuestionarse la política de evaluación estandarizada y centralizada que permite medir la calidad de las distintas instituciones; y finalmente, no se hace mención de la participación en la construcción de cada proyecto educativo (situado y contextualizado en una comunidad particular) por parte de los actores sociales, sino que sólo se les considera para pensar una reforma que, indudablemente, luego será implementada y monitoreada por el gobierno central.

Mi parecer es que para avanzar hacia un sistema educativo inclusivo, las bases del proyecto presentadas por los actores sociales tiene más elementos importantes, que sin embargo no están siendo considerados por el gobierno, puesto que ellos ya habían construido una propuesta con ideas bases... ¿entonces yo me pregunto si esto de la inclusión será en la medida de lo posible? ¿Será realista pensar en un sistema educativo con eje central en la inclusión? Pensando la inclusión no sólo dentro del aula, por supuesto, sino como la consideración de las necesidades e intereses de todos los actores sociales involucrados en el proceso de enseñanza-aprendizaje... O incluso si pienso la inclusión como algo menos ambicioso, como el proceso centrado en la consideración de las particularidades de los estudiantes dentro del aula... ¿es posible alcanzarla sin que antes, desde el gobierno, se termine con la lógica de medición y evaluación estandarizada, como evidencia de la calidad de cada institución?

Hay algunos temas que están, en este momento, fuera del alcance de lo que los distintos actores sociales pueden hacer y decir en torno del sistema educativo, y si bien comparto la idea de que la gran revolución se hace con pequeñas revoluciones cotidianas (grano a grano se forman largas playas, diría Silvio), a veces me pregunto cuánto faltará para esa gran revolución... 

Fuentes: http://reformaeducacional.gob.cl/participacion/, http://fech.cl/estudiantes-secundarios-universitarios-y-actores-sociales-de-la-educacion-se-reuniran-a-discutir-perspectivas-de-cara-a-la-reforma-2/

Dewey y la Clase especial

-¿Por qué lo hiciste?
- ¿Hace cuánto leíste ese libro?
-Hace como 3 años
-También yo y todos en este salón, nos tratan como estúpidos en vez de raros. Nos están matando lentamente.

Este video es un extracto de un capítulo de la serie “Malcolm in the middle” específicamente el capítulo 18 de la 5ta temporada. Hare un pequeño resumen del capítulo para comprender lo que sucede. Dewey el chico que se encuentra sentado acaba de responder mal todas las preguntas de un examen que define en qué nivel de su colegio debe asistir y como erró a propósito queda en la clase de los “desadaptados”. Acá Conoce a el grupo curso que en primera instancia se muestra como un grupo completamente desadaptado e imposible para trabajar por parte de la escuela. En esta escena uno de los chicos es llamado a leer un libro en frente de la clase y este simplemente no lo hace, al Dewey preguntarle la razón de su comportamiento se da paso a un interesante diálogo, el cual está descrito arriba.


Porqué es interesante esta escena o qué relación tiene con lo que cada día vemos en clases, es precisamente la esencia del capítulo en sí, es una crítica al sistema escolar en su conjunto. Actualmente, en Chile, existen diversos colegios cuya distinción de alumnos se realiza por cursos en donde se encuentran los más avanzados y de allí hacia adelante, un caso destacado es del Liceo 7 de Providencia, cuyos alumnas que entran a la clase “A de simce” son las con mejores rendimientos. Otros casos que se pueden observar también son las diferencias existentes entre colegios municipales, como lo podrían ser “la Selección” del Instituto Nacional, contra la “aceptación de alumnos problemáticos” que hace por ejemplo el Colegio Alicura de Peñalolén. 

El problema de este sistema de educación es que si bien, claro, puede ser favorable para los alumnos que están en la cima, en cuanto a estar entre pares con “capacidades” parecidas, tiene otro extremo. Los alumnos que quedan fuera de estos parámetros, los alumnos que necesitan “apoyo especial”. Estos alumnos bajo el pretexto de necesitar “mayor atención” o “mayores recursos”, son separados del resto, de los “normales” para entonces ser etiquetados como “especiales”. No teniendo entonces relación con los que si se adaptan al sistema educativo, no “ensuciándolos”, pero no teniendo tampoco la oportunidad de aprender de ellos, de ser educados por profesionales del mismo tipo que los anteriores, no poder ni siquiera compartir sueños con otros niños de su edad, debido a que los tratan como incapaces a ellos y todos a quienes asisten a estas escuelas “especiales”. Siendo objeto entonces de el trato que le da la educación chilena a sus alumnos de “desecho”   

Diseño Universal de Aprendizaje


El Diseño Universal para el Aprendizaje (DUA) es una novedosa estructura que permite desarrollar una educación más inclusiva, poniendo el énfasis en la adaptación del currículum en vez de la adaptación de los estudiantes.
Murillo y Duk (2013) presentan el DUA como alternativa valiosa que represente un respaldo teórico y múltiples herramientas como apoyo para el trabajo en el aula, tomando en consideración la variabilidad de los estudiantes y no regirse por la “media imaginaria” que existe en los currículum actuales (CAST, 2013). Este diseño tiene como objetivo proporcionar igualdad de oportunidades para que todos los estudiantes, comprendiendo y aceptando la diversidad de estos, puedan aprender (CAST, 2001; en Murillo y Duk, 2013, pp.12). Para su implementación es fundamental cambiar el foco del conflicto: el trabajo de adaptación en el proceso educativo correspondo al currículum (y todos los elementos que conlleva este punto) y no al estudiante mismo.
La mayoría de los currículos tradicionales están pensados como estructuras rígidas y, cualquier cambio que se considere como urgente según las necesidades de los estudiantes, es posterior a la instancia de construcción, durante la implementación del mismo. Según esta postura, los estudiantes son en general los mismos, con los mismos intereses y estilos de aprendizaje. Sin embargo, esto no es así. Más allá de las diferencias que podría producirse por algún tipo de discapacidad especifica, también hay diferencias culturales, socioeconómicas, étnicas, etc. que influyen en el aprendizaje de los niños. Es por esto, que el DUA presenta un currículum en donde se considera la variabilidad en la construcción de este, es flexible y personalizable una vez puesto en práctica porque incluye las diferencias individuales como un hecho seguro y no como una situación hipotética.
A los conocimientos teóricos fundamentales en la educación (Piaget, Vygotsky y Bruner, entre otros), se le suma la implementación de TIC en el aula y los hallazgos neurocientíficos que han identificado tres redes cerebrales involucrados en el aprendizaje: “a)  Red de reconocimiento, encargada de reconocer e interpretar la información; b) Red estratégica, encargada de generar patrones motores y acciones; y c) Red afectiva, encargada del significado emocional e implicación en el aprendizaje” (Murillo y Duk, 2013).
Estas redes dan las bases para la formulación de tres principios fundamentales de este diseño, que permitan a los estudiantes a convertirse en aprendices expertos (CAST, 2013). Estos principios son:
“1. Proporcionar múltiples medios de presentación y representación. Se basa en las diferencias que manifiestan los estudiantes en la forma de percibir y comprender la información que se les presenta, de tal forma que considera diversas modalidades sensoriales, estilos de aprendizaje, intereses, preferencias.
2. Proporcionar múltiples medios de expresión y ejecución. Reconoce diferencias en la forma en la que los estudiantes interactúan con la información y sus conocimientos y en la manera que demuestran el resultado de su aprendizaje. Y, de esta forma, considera todas las formas de comunicación/expresión, la aplicación de estrategias cognitivas y meta cognitivas.
3. Proporcionar múltiples formas de implicación y motivación: Se refiere a las diversas motivaciones para implicarse en el aprendizaje. Esta idea ofrece una adecuada respuesta a variados intereses y preferencias, a las diversas formas de participación, así como los principios de autonomía, elementos de novedad, personalización y variedad.” (Murillo y Duk, 2013).
En nuestro sistema de educación es difícil poner en práctica métodos inclusivos mientras el foco siga están en los resultados y no en el aprendizaje o en el bienestar de los alumnos. Esta propuesta presenta herramientas que permiten manipular las variables dentro del aula. Si bien está desarrollado en un contexto socioeconómico diferente al nuestro (National center on universal design for learning), puede ser una alternativa posible y que, mediante un esfuerzo en la construcción de un diseño para Latinoamérica, se incorporen también elementos como la cultura indígena de cada país, por ejemplo.

Referencias.
Murillo, F. y Duk, C. (2013). El valor del "Diseño Universal de Aprendizaje" para la Educación Inclusiva. Revista latinoamericana de educación inclusiva, 7(1), pp. 11-13.

CAST. (2013). Pautas sobre el Diseño Universal para el Aprendizaje (DUA) Texto Completo, Versión 2.0 (Pastor, Sánchez, Sánchez y Zubillaga, Trads.).  Madrid, España: Universidad Complutense de Madrid. (Trabajo original publicado en 2011).

Ken Robinson: Cómo escapar del valle de la muerte de la educación.

Ken Robinson es un educador, escritor, investigador y conferencista británico, Doctor de la Universidad de Londres. Ha participado en proyectos e iniciativas de sistemas educativos locales y nacionales, organizaciones culturales y comunidades. Todas con un mismo objetivo: “para transformar la cultura de la educación y organizaciones con un concepción más rica de la creatividad e inteligencia humana”.
El video presentado a continuación es una charla de Ken Robinson en TED (tecnología, entretenimiento, diseño), organización sin fines de lucro dedicada a las “ideas dignas de difundir”.

(Para acceder a subtítulos en español, ingresar a la web de Ken Robinson)

A mi parecer, esta charla involucra a varios de los actores de la educación, como lo son las políticas, los profesores, los alumnos y la comunidad educativa. Principalmente, se evidencia la dirección (equivocada) que han tomado y siguen tomando las políticas educativas, en este caso de Estados Unidos, pero que sin duda se replican en otros países como el nuestro.
Los tres principios de los cuales habla Ken Robinson son decisivos en la comprensión de la educación, de esta relación enseñanza-aprendizaje, porque refieren a los aspectos que nos caracterizan como humanos, como seres vivos y orgánicos en constante desarrollo gracias al ambiente en donde estemos. Estos son que somos todos diferentes y diversos, por ende, tenemos distintos intereses y distintas formas de aprender; sin embargo, la curiosidad es un elemento que todos tenemos y funciona como el motor del aprendizaje, por ende, enseñar implica sin duda la creatividad, la imaginación, la diversidad, la provocación del interés en los alumnos; y la mente humana es creativa, crea constantemente alternativas y posibilidades, por ende, la educación debe despertarla y desarrollarla, no estandarizarla como lo hace actualmente la cultura educativa dominante.
Estos principios no son “el gran descubrimiento de Ken Robinson”, estos son temas que hemos visto en clases a través de distintos autores, de su experiencia, así como la de nuestros profesores, y por qué no la nuestra. Todos hemos vivido momentos en que el colegio o la universidad no nos motiva, que lo que allí nos enseñan está alejado quizás de nuestras creencias, intereses, objetivos, etc. o que no se nos tomó en cuenta para el desarrollo de las clases. Que valía mucho más la opinión del profesor antes que la nuestra o de otro compañero. Qué a veces las preguntas sí eran tontas. Que lo que reflejan las notas sí era el conocimiento que cada uno tenía y que el principal objetivo era ser el mejor del curso, de la generación, pues así tenías el certificado de “ser inteligente”. Aquella es una forma de ver la educación bastante difícil de cambiar a nivel individual, más aún lo es cambiar todo un sistema de forma concreta.
Sin embargo, algunos puntos están claros: hay que individualizar la enseñanza y el aprendizaje, hay que tener estándares más altos con los docentes, invertir en ellos, y hay que delegar la responsabilidad por la educación a la misma comunidad educativa que la crea día tra día en las salas de clases.
La investigación y el conocimiento relacionado a la educación y cómo mejorarla están, lo que falta es la disposición principalmente política. Pero, la disposición política no se da por sí sola, es gracias a la demanda social, el reclamo, y también el involucramiento de todos que será posible.

Monday, October 20, 2014

Profesorado, cultura y postmodernidad. Madrid: Morata. (Capítulo X)

El autor inicia  el desarrollo del texto en función de la necesidad de la restructuración, la cual la concibe en función de que la reestructuración “respetaría y apoyaría la profesionalidad de los docentes a la hora de adoptar en sus clases las decisiones que mejor se acomodasen a los objetivos locales y estatales, responsabilizando también a los profesores de lo que hicieran” (Hargreves, 1994).

Es así que para proseguir con la argumentación el autor considera diversas definiciones del término reestructuración, llegando al consenso de que las diversas definiciones consideran la importancia de la “redefinición de reglas, papeles, responsabilidades y relaciones de los alumnos, profesores y líderes (de las escuelas)” (Hargreves, 1994). En función de estos elementos propios de la reestructuración es que plantea que las reformas educacionales han fracasado en cuanto consideran estos elementos como aislados y no en sus relaciones e interdependencia, así como tampoco considera las relaciones de poder que se generan dentro de la escuela. La reestructuración entonces debería considerar  la creación de distintos ambientes de aprendizajes que logren dar abasto a las necesidades del alumnado.

Es así que en el panorama actual la palabra reestructuración tiene múltiples usos y muy pocas veces logra llegar a su profundidad. En función de esto es que se presentan los principios importantes de la reestructuración, los cuales son el logro de una mayor autonomía del establecimiento escolar y de la potenciación de sus profesionales; la estructuración flexible de los alumnos para el trabajo en aula; la mayor capacidad de respuesta de la escuela frente a las necesidades de los estudiantes; mayor apoyo a los docentes en cuanto a las capacidades y herramientas con las que cuentan para atender a alumnos en situación de riesgo, y finalmente una mayor re de soporte en otras organizaciones para así potenciar los recursos existentes. Todos estos objetivos o fundamentos de la reestructuración no ven su reflejo en los programas que buscan integrar la reestructuración como una herramienta de cambio.

Uno de los componentes importantes de la reestructuración es la colaboración, en cuanto también emerja la consideración de la escuela y los docentes tanto como una organización y trabajadores. En este contexto de colaboración se enmarcan principios como el apoyo moral, el aumento de la eficiencia, la mejora de la eficacia, la reducción del exceso de trabajo, la generación de perspectivas temporales sincronizadas, la reducción de la incertidumbre, una mayor capacidad de reflexión, la mejora de las respuesta de la escuela (y sus funcionarios) frente a las necesidades de alumnos y familias, mayores oportunidades para aprender entre los docentes, un perfeccionamiento continuo. Sin embargo y pese a estas ganancias en la implementación de la colaboración, también es posible identificar ciertos riesgos asociados, los que tienen que ver con una comodidad y complacencia excesiva, un conformismo respecto al trabajo individual, un ambiente excesivamente colaborador que tienda a dinámicas artificiales de interacción y la sumisión frente a dinámicas impuestas. Esto nos conduce a la reflexión sobre la importancia de la implementación de la colaboración con precaución  a modo de no entorpecer la reestructuración desde su interior.

Desde la comprensión de los docentes como un actor clave y la necesidad de la colaboración es que emerge con fuerza la idea de “la voz” como la consideración de sus propia vida que se vuelca en su labor de formador. Por otro lado se considera la función del director como quien articula la visión futura de la escuela, buscando un consenso. Frente a esta dicotomía de visión y voz, cruzada por relaciones de poder, es que los docentes tienen a suprimir su voz  en función de una gestión propensa a la manipulación;  sin embargo esta dicotomía es reconciliable en cuanto se reconozca el valor de ambos componentes en la reestructuración efectiva de las dinámicas escolares.

Otro componente importante es la confianza en los docentes y entre los mismos, de manera que se reduzca la burocracia, aumente la eficacia y el desarrollo personal de quienes se hacen parte del proceso.

Por otro lado es posible identificar una dicotomía cultura/ estructura que se dibuja en el imaginario y que se debe repensar en función de comprender que ambos son complementarios al buen funcionamiento de la comunidad escolar en su totalidad. Es esta misma comunidad la que debe ser parte entonces del proceso de reestructuración en función de mejorar lo existente sin violar códigos o condiciones básicas de convivencia y proyecto futuro.


Comentario:
El texto se enmarca en una necesidad propia de las comunidades educativas en cuanto a que la reestructuración se vuelve necesaria para la mejora de los procesos educativos y las comunidades educativas en su totalidad.

Este proceso si bien necesario y que busca su logro hasta la actualidad, debe considerar la complejidad de la interacción de múltiples variables que se relacionan más allá de lo evidente en  lo cotidiano. Se hace importante entonces comprender las relaciones de variables que al ojo espectador parecieran no existir, y que a quienes trabajan en la labor docente muchas veces se les olvidan.

A destacar como importante resulta el valor de los actores docentes como entes con voz, que deben entonces tener un mayor reconocimiento a la vez que una independencia respecto a su labor y desarrollo profesional en pro de mejores condiciones de desarrollo humano, profesional y personal en un contexto centrado en la confianza mutua, sin abusar de aquella.

Referencia:
 Hargreaves, A. (1994). Profesorado, cultura y postmodernidad. Madrid: Morata. (Capítulo X)

Citas:
“Se pensaba que esta reestructuración respetaría y apoyaría la profesionalidad de los docentes a la hora de adoptar en sus clases las decisiones que mejor se acomodasen a los objetivos locales y estatales, responsabilizando también a los profesores de lo que hicieran.” P.264

“Pero la reestructuración todavía está iniciándose. Los modelos son muy variados; los resultados, poco claros, y las posibilidades de ir más allá de los experimentos aislados, desconocidas.” P. 265

“En efecto, aunque la reestructuración tenga muchos significados posibles, el principio de la colaboración ocupa un lugar central en casi todos ellos, ya se trate de la colaboración ente profesores o entre éstos y directores, estudiantes, padres y la comunidad, en general”. P.268

“La colaboración y la potenciación supondrá una mayor libertad de criterio de los profesores en ciertos campos, pero, considerablemente menos en otros, en la medida en que trabajen más cerca de los alumnos y de los padres, como coparticipes en el proceso de aprendizaje.” P.266


Comunidades de aprendizaje: una escuela en la sociedad de la información para todas las personas

Elboj, C., Puigdellivol, I., Soler, M. y Valls, R. (2006). Capítulo 5. Una escuela en la sociedad de la información para todas las personas .Comunidades de aprendizaje. Transformar la educación. Barcelona: Editorial Graó. (pp. 73-90).

Resumen: Las Comunidades de aprendizaje no son un simple modelo creado para ser llevado a la práctica, sino más bien una construcción que se ha ido teorizando a través de la experiencia y el resultado de esto o lo que conocemos como comunidades de aprendizaje es entonces la síntesis de estas experiencias. Y se han ido moldeando por los propios protagonistas de estas historias, los actores involucrados en la educación.
Este capítulo se trata más bien de un “manual” que describe las etapas por las cuales debe pasar una “comunidad de aprendizaje” para lograr establecerse como tal, siendo entonces recomendaciones para crear una escuela para todas las personas, por todas las personas. En el siguiente entonces se describen los pasos que se debiesen llevar a cabo y los objetivos que cada uno de ellos contempla, que es lo que abarca y quienes se encuentran directamente involucrados en cada uno de los procesos que significan establecer las bases de la escuela que la comunidad desea.
Las comunidades de aprendizaje son siempre proyectos que necesitan de constante revisión y análisis, los principios básicos de una comunidad de aprendizaje, son entonces, tal como su nombre lo anticipa, los cuales relacionen la educación con la comunidad, con su entorno siendo entonces una relación de cambio bidireccional, entiéndase que el entorno influya sobra la comunidad de aprendizaje y que a su vez esta genere cambios en su entorno. Siendo quienes participen en esta comunidad todos quienes estén involucrados de alguna manera con esta, existiendo información disponible para todos. Siendo esta transmisión de información llevada a cabo a través del aprendizaje dialógico (que todo el proceso educativo se enmarque dentro de la comunicación, el diálogo y los consensos)
Las orientaciones Pedagógicas de una Comunidad de aprendizaje se centra en la participación de todos los agentes de la comunidad y la centralidad del aprendizaje siendo este más igualitario, y crítico, basado en las necesidades reales de la comunidad. Las expectativas positivas son  otro punto a tomar en cuenta, de modo que los resultados “desalentadores” no sean motivo de dejar de intentarlo, si no por el contrario de seguir reforzando la idea. También está  el progreso permanente el cual considera lo anteriormente nombrado, haciendo del aprendizaje un sistema continuo que no puede ser medido en su totalidad en “momentos específicos”
Para la Puesta en Marcha de una Comunidad de aprendizaje son diversas fases por las cuales debe pasar la comunidad, las cuales tienen diversas duraciones y participantes así como objetivos.
La primera es la Sensibilización, el cual se trata del proyecto en sí mismo, de las necesidades existentes y las condiciones para que un proyecto así se lleve a cabo, se deben tomar en cuenta, cómo sería el proyecto, al tipo de comunidad al cual y por el cual sería aplicado, y datos más específicos de la formación que se llevaría a cabo.
La siguiente Fase es la toma de decisión, la cual dará pie a la formación del proyecto, de ser aprobado por el 90% del claustro y mostrando las condiciones necesarias entonces no existiría problemas por el momento en realizar el mismo.
La tercera Fase es la del sueño, en donde todos los involucrados en el proceso intentan entonces describir lo que les gustaría de dicho proceso educativo, y es evaluado por parte separada por cada uno de los actores involucrados, padres, claustro, profesores, etc.
La Fase de selección de prioridades por su parte es donde acuerdan los cambios a realizar, como se llevarán a cabo y en los plazos que se irán realizando y también ya ideando un plan a largo plazo.
La Fase de planificación se trata de la activación del plan de transformación, y de cómo las propuestas se van materializando en proyectos realizables.
La Consolidación del proceso es a su vez el cómo poner o como se pondrá en marcha el proceso, tomándolo como un proceso sin un final, dándole continuidad al mismo.
La fase de investigación se trata de los métodos en sí que serán empleados en el proyecto y las maneras en las cuales el aprendizaje será llevado a cabo
La Fase de Formación, todos los actores involucrados comienzan a trabajar directamente en la formación para llevar a cabo el proyecto, tanto material como de otros tipos que sea necesario, esto involucra a toda la comunidad
La fase de Evaluación es en la cual se observan y valoran los procesos que se han llevado a cabo y como estos son gestores de cambios, así como esta misma Evaluación lo será.

Comentario:
Una comunidad Educativa es lejos de ser una “idea la ligera”, el establecer una escuela auto gestionada por su comunidad tiene ventajas significativas ante otros tipos de escuelas, debido a la participación que requiere para llegar a establecerse siquiera y el nivel de compromiso que los actores deben aceptar para poder involucrarse en este proceso.
Es importante entonces observar como el proceso mismo de creación de una escuela es un proceso de aprendizaje en sí y que los objetivos que se establecen se van cumpliendo desde el primer momento en que se plantea la idea de soñar con una escuela distinta.
El cómo cada fase involucra a toda la comunidad es un punto completamente necesario de observar y como esta misma participación da como resultado un proyecto único y propio de dicha comunidad, del cual se hace partícipe y responsable.

Citas:
“Transformar una escuela quiere decir transformar su estructura interna, sus relaciones y su entorno al mismo tiempo y hacerlo de abajo a arriba, como una propuesta, nunca impuesta” P. 73

“Comunidades de aprendizaje es un proyecto del entorno. La transformación que se propone no afecta sólo al interior del aula o del centro educativo. Se refiere a toda la comunidad-barrio, pueblo-.” P. 75

"Es importante que en la evaluación del proceso no sólo emerjan los cambios importantes a introducir, sino también se consideren positivas las transformaciones conseguidas hasta el momento” P. 78




Sunday, October 19, 2014

Dos maestros en el aula.

Huguet, T. (2006). Dos maestros en el aula. En Aprender juntos en el aula: Una propuesta inclusiva. Barcelona, España: Grao, IRIF, S.L. (pp. 89-127).

Síntesis y conclusiones.
A modo de contextualización, Huguet inicia recalcando la importancia que un trabajo inclusivo dentro de los grupos de referencias, en el contexto escolar en este caso, repercute en la concepción de mundo e identidad de cada alumno y alumna, así como en el auto-concepto de cada uno de ellos. Se aborda el rol que tienen los docentes, la importancia en crear ambientes inclusivos que permitan a los niños a desarrollarse. Como adquieren y comparten responsabilidades.
Para que este trabajo resultase es necesaria la colaboración de ambos profesores, en estrategia, gestión, etc. Como condicionantes para un buen funcionamiento, está establecer la relación dentro de la sala en un entorno de confianza mutua, incluir al profesor de apoyo al grupo y una comunicación entre profesores. Estas asegurarían la colaboración, junto con permitir una valoración positiva y la libertad de acción de ambos profesores. Sin embargo, cambiar un modelo tradicional de educación por este más inclusivo puede atraer resistencias dentro de los profesores curriculares, como “compartir” la relación que se ha establecido con los alumnos o la “sobrecarga” que implica involucrar a un externo en la dinámica educativa. Ambas afirmaciones son contrarrestadas con el beneficio a largo plazo en la autonomía de los niños y en la gratificación que este desarrollo produciría en los involucrados.
Más concreto, esta colaboración entre profesores se expresa en las sesiones compartidas de trabajo, donde el profesor de apoyo se incluya íntegramente en las actividades que esta designada su participación, y no sea un extraño ni que genere divisiones dentro de la clase. Para lo cual es aconsejable, realizar la planificación de las sesiones en conjunto, integrando las actividades de ambos y no de manera independiente. Siendo así, se puede coordinar: la participación de cada profesor y como dirigir cada actividad; que contenidos se priorizarán para incorporación de apoyo extra, que permitan fomentar la autonomía y el desarrollo de habilidades funcionales en los alumnos; el tipo de actividades a realizar en este contexto, incorporando metodologías que permitan la cooperación y participación considerando las necesidades de todos los niños dentro de la sala. Además se adjunta diversas estrategias de intervención para implementar dentro del aula en distintos momentos al realizar una actividad, de modo que sea una pauta de apoyo. Se explica detalladamente los 8 niveles de apoyo que dos maestros realizan, avanzando desde la división de trabajo y organización, hasta la colaboración y la coordinación entre ellos para armar una actividad que integre al curso y permita observar a ambos docentes en igualdad de condiciones.
Finalmente, abarca el papel del profesor de apoyo, el cual no solo incluye los trabajo pedagógicos sino que también la incorporación de una nueva perspectiva o una nueva metodología. Se presenta el perfil profesional que debieran tener para que un trabajo de este tipo resulte, se enfatizan características como: la adaptabilidad, capacidad de negociación y detección de problemas,  iniciativa, actitudes de respeto, de ayuda y de confianza. Se destaca las funciones que este debiera desarrollar en los tres niveles dentro de la escuela, la institución como tal, el aula y los alumnos: trabajaría por re-estructurar la cultura escolar por una inclusiva, en la elaboración y adaptación de programas para cada curso y ambiente, y poner atención en las necesidades educativas y las variables del entono involucradas, respectivamente.
Breve Comentario.
De las variadas reflexiones que me surgieron mientras leía el texto, una me invitó a pensar otra arista de la educación inclusiva que anteriormente no había considerado, la de los profesores dentro del aula.
Muchas veces me preguntaba cómo podría resultar la dinámica con el profesor curricular y uno de apoyo, cómo lograr un trabajo en conjunto que involucrara a ambas partes y que no terminara siendo la incorporación de aquellos que necesitan mayor apoyo dentro de la misma sala creando una muralla invisible, pero que de igual manera se encuentre ahí. En cierta forma necesitaba una especie de pauta que indicara paso a paso como llevar a cabo el trabajo con dos profesores. Con el texto entendí que no se puede hacer así. El proceso de inclusión no puede ser entendido como algo que ocurre solo entre los alumnos, sino que es un proceso que se da simultáneamente también entre los mismos profesores. El trabajo de observación del aula, la incorporación metodologías y formas de trabajos implica directamente un proceso de inclusión de distintas formas de ver la educación. Implica la aceptación de las características personales del otro profesional y encontrar la forma más adecuada de no permitir que esas diferencias repercutan en el trabajo dentro del aula.
Considerando esta alianza como una colaboración y cooperación mutua, para mí, muestra una arista completamente distinta de afrontar el desafío de la inclusión en la educación, puesto que es una labor que se debe realizar desde el mismo centro de los docentes, como una oportunidad que al cambio que los involucra directamente y no como una pantalla a lo que debiera ser, pero que en realidad no se aplica.
Citas textuales.
“Los maestros han de creer en el derecho que tienen todos los alumnos a ser educados juntos y confiar en su capacidad de ir gestionándolo con el apoyo necesario” (2006, pp. 90).
“(…) Y ano se entiende que es el tutor quien deja que el maestro de un apoyo entre en ‘su clase’, sino que se considera que los dos maestros comparten un espacio y un grupo en igualdad de condiciones” (pp. 93).
“Los maestros de apoyo que entran en diferentes clases también se sienten más o menos incluidos en la dinámica del aula según las actividades y las relaciones que se establecen con el maestro curricular” (pp. 95-96).

“Cambiar el estilo docente en pro de prácticas más abiertas que respondan a la diversidad es una tarea compleja que requiere tiempo, interés, formación y, sobre todo, acompañamiento dentro del aula” (pp. 104).

Comunidades de aprendizaje y teorías dialógicas.

Elboj, C., Puigdellivol, I., Soler, M. y Valls, R. (2006). Capítulo 3 Teorías dialógicas. Comunidades de aprendizaje. Transformar la educación. Barcelona: Editorial Graó. (pp. 37-53).

Síntesis y conclusiones:

El capítulo trata las distintas ideas sociales transformadoras que tienen al diálogo como su punto de origen, para aplicarlas después en la educación y el aprendizaje. Primero se contextualiza y puntualiza que es dentro de la perspectiva crítica de las teorías dialógicas donde se enmarcan las comunidades de aprendizaje, con bases teóricas del CREA y de autores como Freire, Habermas, Mead y Vigotsky. Estas comunidades apuestan por la transformación de la escuela y la comunidad potenciando una educación de igualdad de oportunidades educativas en torno al diálogo entre profesores, familiares, alumnos y otros agentes educativos, todos insertos en un particular contexto: la modernidad dialógica.

Algunas aportaciones dialógicas de las ciencias sociales a las comunidades de aprendizaje son: la capacidad de dialogar es una competencia humana innata. En esta misma línea se defiende el concepto de inteligencia cultural que incluye las dimensiones de la interacción humana y las habilidades prácticas, académicas y comunicativas; la capacidad transformadora de los actores sociales desde un enfoque del aprendizaje basado en las competencias y las posibilidades que otorgan las interacciones transformadoras; la interacción social como un proceso que crea significados susceptibles de modificación mediante este mismo proceso interpretativo cuando una persona interactúa o dialoga con otro(s); el feminismo dialógico que apuesta por un proyecto democrático en torno al diálogo entre mujeres de diferentes realidades sociales, culturales y académicas; y el universalismo dialógico el cual defiende que cualquier práctica cultural se debe sustentar en principios universales consensuados, en este sentido, se basa en el principio de igualdad de diferencias, o el igual derecho de toda persona a ser diferente, reivindicando la igualdad de oportunidades y la extensión de los derechos humanos a todos.

La perspectiva dialógica de estos aportes, entre estos el concepto de intersubjetividad, la relevancia de la interacción social y la creación colectiva de significados, son claves para comprender el concepto de aprendizaje dialógico que desarrolla el CREA. Donde no se adapta el currículo al contexto, sino que se transforman las condiciones contextuales del aprendizaje, y donde las comunidades de aprendizaje empiezan por transformar la escuela y el entorno sociocultural permitiendo que la comunidad participe en el diseño e intervención educativa.

Es así que la concepción dialógica del aprendizaje engloba y sobrepasa la concepción constructivista porque toma en consideración a todos los actores del proceso y pone énfasis, no en los significados interiorizados individualmente, sino en la posibilidad de compartirlos a través del diálogo. En las comunidades de aprendizaje, los alumnos, las familias, los profesores y otros educadores de la comunidad se enriquecen mutuamente en un intercambio de experiencias y conocimientos gracias al diálogo igualitario.

Breve comentario:

Si nos remontamos a unos cuantos siglos antes, no solo distinguiremos una cantidad magnánima de diferencias en nuestros estratos sociales, económicos y culturales  (que aún perduran), donde la educación sólo estaba destinada a unos cuantos. En el día de hoy, eso ha cambiado. Como todo ser humano, sin depender de nuestra prominencia, tenemos derecho a participar dentro de una colectividad educativa, lo cual es esencial dentro del desarrollo psicosocial. Nos ayuda a formar un pensamiento individual, pero siempre en relación con nuestro entorno sociohistórico.

En primera instancia como adultos debemos considerar que el primer paso para un avance dentro de los establecimientos educativos, es despojarnos de prejuicios sociales, creando un ambiente participativo en donde todos compartan sus ideas, argumentos, experiencias y propuestas. Una palabra, sin importar de donde provenga, puede hacer la diferencia, por muy simple que parezca.

La educación es más importante de lo que cualquiera se imaginaría, las comunidades de aprendizaje abren las puertas del mañana, destruyen el prejuicio y forman a todo ser humano ante cualquier adversidad porque bajo sus principios de diálogo, igualdad y acción social es posible pensar en la transformación de la realidad, en que la educación sí es desigual, injusta y que esta situación no es natural, menos correcta. Debemos educarnos no con el miedo al otro o la sumisión a las autoridades educativas, sino con el aprendizaje en la igualdad, en el compartir, en la reflexión, en el cuestionamiento, en el diálogo. Y como señala Freire en una parte del texto “La cuestión está en transformar las dificultades en posibilidades”.

Citas:

“Las comunidades de aprendizaje son un claro ejemplo de cómo organizar un proyecto educativo sobre la base del dialogo igualitario a través de una organización democrática donde todas las personas que forman la comunidad educativa llegan a acuerdos sobre los objetivos y prioridades, las normas y, en definitiva, la escuela que sueñan” (p. 41).

“En comunidades de aprendizaje, muchos familiares han empezado a participar en espacios de aprendizaje y a involucrarse en la construcción de la escuela para sus hijas e hijos gracias a la creación de nuevos significados emergidos en el dialogo con otros educadores y miembros de la comunidad, llevando a cabo importantes transformaciones dentro de sus hogares y cambiando al mismo tiempo los estereotipos y prejuicios sociales sobre sus capacidades e intereses” (p. 44-45).


“En la apuesta por los derechos humanos hemos de luchar por extender el derecho a la educación. Sobre esta base, las comunidades de aprendizaje buscan maximizar el proceso de aprendizaje de toda la comunidad, alejándose de discursos estructuralistas y postmodernos que legitiman la existencia de desigualdades educativas y sociales y favorecen que sólo una minoría selecta acceda a una educación de calidad” (p. 46).